México, 14 feb (EFE).- La delegación de la Unión Europea en México condenó hoy firmemente el asesinato del periodista Gregorio Jiménez de la Cruz, cuyo cadáver apareció el pasado martes en el estado de Veracruz.
Jiménez, que trabajaba para el diario Notisur, fue secuestrado el pasado 5 de febrero en su domicilio. Su cadáver fue hallado junto a los de otras dos personas en una fosa clandestina del municipio de Las Choapas, en Veracruz.
“La Delegación de la Unión Europea condena firmemente este asesinato y hace un llamamiento a las autoridades competentes a hacer todo lo posible para esclarecer los hechos, identificar, arrestar y juzgar a las personas responsables”, dijo la legación diplomática en un comunicado difundido hoy en esta capital.
También indicó que toma “buena nota” de los primeros resultados de las pesquisas, que llevaron a la detención de cinco presuntos autores de este asesinato.
La Unión Europea “confía en el trabajo que las autoridades mexicanas están realizando en la protección de la libertad de expresión”, agrega el comunicado.
En ese sentido, la nota menciona “la labor de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión y la aplicación del Convenio de colaboración para la implementación de acciones de prevención y protección de periodistas”.
Según las autoridades de Veracruz, el homicidio del periodista se debió a “diferencias personales” con la dueña de un bar, que ordenó su asesinato a varias personas, algunas de las cuales ya han sido detenidas.
Organizaciones profesionales han pedido a las autoridades que se agoten todas las posibles líneas de investigación y no se descarte totalmente que el profesional pueda haber sido asesinado por su trabajo periodístico.
De 2011 a la fecha han sido asesinados 10 periodistas en Veracruz, al menos tres han sido reportados como desaparecidos y una docena han tenido que abandonar el estado debido al clima de violencia generado por los cárteles de las drogas.
Con 87 periodistas asesinados desde 2000, según cifras de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), México es el país más peligroso de América Latina para ejercer esta profesión. EFE
